Ciudad de México, 15 de septiembre de 2025 — La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) sancionó al banco Ve por Más (Bx+), propiedad del empresario Antonio del Valle, con multas que ascienden a 27 millones 334 mil 100 pesos por deficiencias graves en sus procesos de prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo.
Una de las sanciones más severas en la banca mexicana
Las sanciones fueron aplicadas entre julio y agosto e incluyeron 27 multas individuales, con montos que oscilaron entre 448,100 y 2 millones 688,600 pesos. En ocho de los casos, la autoridad aplicó la sanción máxima prevista.
Este paquete de sanciones se coloca entre los más altos en la historia reciente contra un banco en México por omisiones en materia de cumplimiento regulatorio.
La CNBV argumentó que las irregularidades no son incidentes aislados, sino prácticas que evidencian debilidades estructurales en los controles internos de la institución.
Fallas señaladas por la CNBV
Entre las omisiones detectadas a Ve por Más destacan:
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No recabar la información y documentos de identificación de clientes en 2021.
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No verificar la identidad de fideicomitentes y fideicomisarios en operaciones de 2019.
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No conservar la documentación mínima de clientes durante al menos 10 años.
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No contar con un sistema automatizado para integrar todas las cuentas y contratos de un mismo cliente.
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Retrasos u omisiones en reportes mensuales de transferencias internacionales mayores a mil dólares que debían enviarse a la Secretaría de Hacienda.
Implicaciones regulatorias y reputacionales
Analistas subrayan que estas multas forman parte de una estrategia de la CNBV para reforzar la supervisión del sector financiero, en línea con los estándares internacionales del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
El objetivo es prevenir que el sistema bancario mexicano sea utilizado para operaciones vinculadas con recursos ilícitos o financiamiento al terrorismo.
Para Ve por Más, el desafío va más allá del pago de la multa: deberá fortalecer sus áreas de cumplimiento normativo, invertir en tecnología de monitoreo y reforzar la capacitación de su personal. Aunque el banco podría impugnar las sanciones, especialistas señalan que el mayor impacto será reputacional, ya que la confianza de clientes y mercados depende de su capacidad para cumplir con las regulaciones.