Anchorage, Alaska — 15 de agosto de 2025
En una cumbre muy esperada, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió hoy a su homólogo ruso, Vladimir Putin, en la base aérea Elmendorf-Richardson de Anchorage, Alaska. El apretón de manos en la pista marcó el inicio de un encuentro tenso y cargado de expectativas en plena guerra en Ucrania.
Ambos mandatarios posaron brevemente ante la prensa y luego se dirigieron en limusina a una reunión a puerta cerrada, acompañados por dos asesores cada uno. Por parte de Rusia estuvieron el ministro de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, y el asesor Yuri Ushakov; mientras que del lado de EE.UU. participaron el secretario de Estado, Marco Rubio, y el enviado especial Steve Witkoff.
Zelenskiy al margen, pero vigilante
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, no fue invitado a la reunión, que Trump describe como un encuentro preliminar para medir la disposición de Putin hacia un posible alto al fuego. Zelenskiy, por su parte, se mostró escéptico desde su cuenta en X:
“En el día de las negociaciones, los rusos también están matando. Y eso lo dice todo… Todos necesitamos un fin justo a la guerra. Ucrania está dispuesta… y contamos con una postura firme de Estados Unidos. Todo dependerá de esto: los rusos tienen en cuenta la fuerza estadounidense. No se equivoquen: fuerza”.
Más allá de Ucrania
Aunque el foco central del encuentro es el cese de hostilidades en Ucrania, Moscú propuso ampliar la agenda a otros temas bilaterales como el control de armamento nuclear y potenciales cooperaciones económicas.
Trump dejó en claro su prioridad: obtener avances concretos para un alto al fuego. Advirtió que “no estará contento” si la reunión no arroja resultados tangibles.
Un hito diplomático
Este es el primer encuentro cara a cara entre Trump y Putin desde que el presidente estadounidense regresó a la Casa Blanca. Anteriormente, coincidieron en junio de 2019 durante la cumbre del G20 en Osaka, Japón.
