Poza Rica, Ver. — Un escenario financiero complejo se vislumbra para el ejercicio fiscal del próximo año en la zona norte del estado. De acuerdo con los dictámenes del Presupuesto de Egresos aprobados por el Congreso del Estado, el municipio de Poza Rica sufrirá un recorte de 18 millones de pesos (mdp) en sus participaciones federales y estatales para 2026, una cifra que obliga al ayuntamiento a replantear sus prioridades de gasto.
Ajuste “doloroso” para la obra pública
La noticia ha caído como un balde de agua fría en la administración local. Fuentes de la Tesorería Municipal confirmaron que esta disminución impactará directamente en el Plan General de Inversión, afectando rubros sensibles como la obra pública, el bacheo y el mantenimiento urbano, servicios que la ciudadanía ha demandado con insistencia en los últimos meses.
Según el desglose preliminar, la reducción obedece a los ajustes en las fórmulas de distribución de la Ley de Coordinación Fiscal, las cuales penalizan o premian a los municipios basándose en su eficiencia recaudatoria (cobro de predial y agua) y en los índices de población del último censo.
Reingeniería financiera obligatoria
Ante este déficit de 18 millones, el cabildo se verá forzado a realizar una “reingeniería financiera” a partir de enero. Entre las medidas que se analizan para amortiguar el golpe se encuentran:
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Recorte al gasto corriente: Reducción de viáticos, insumos de oficina y eventos protocolarios.
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Freno a nuevas contrataciones: Congelamiento de plazas administrativas no esenciales.
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Optimización de ingresos propios: Se prevé una campaña agresiva de cobro del impuesto predial para intentar recuperar liquidez a través de la recaudación local.
El contexto estatal
Poza Rica no es el único municipio afectado, aunque sí uno de los que registra una de las bajas más cuantiosas en la zona norte. Analistas financieros advierten que la dependencia de los recursos federales sigue siendo el “talón de Aquiles” de los ayuntamientos veracruzanos, dejándolos vulnerables ante los recortes que se deciden desde el centro del país y la capital del estado.
Las autoridades locales tienen hasta el cierre de diciembre para ajustar su Ley de Ingresos y presentar un presupuesto equilibrado que permita la operatividad del municipio sin caer en endeudamiento, a pesar de contar con 18 millones de pesos menos en las arcas.
