El Gobierno de Veracruz, encabezado por la gobernadora Rocío Nahle García, anunció este martes la implementación de un reemplacamiento obligatorio para todos los vehículos registrados en la entidad. La medida —que comenzará en forma escalonada a lo largo de 2026— tiene como objetivo homogeneizar el padrón vehicular y mejorar la seguridad patrimonial mediante la incorporación de nuevas placas con chip electrónico.
Motivación de la medida
Actualmente, el parque vehicular en la entidad circula con matrículas de distintos diseños y colores, lo que dificulta la consolidación de una base de datos vehicular confiable y actualizada. El nuevo sistema de placas con chip busca estandarizar la información y facilitar la trazabilidad de los vehículos en el territorio veracruzano.
La gobernadora aclaró que el proceso no tiene fines recaudatorios, sino que forma parte de una estrategia integral para el reordenamiento vehicular y la seguridad pública.
Cobertura y fases del reemplacamiento
Aunque los vehículos nuevos ya están recibiendo placas con chip desde este año, el cambio obligará a todos los automóviles, incluidos unidades usadas, camionetas y motocicletas, a contar con la nueva matrícula electrónica durante 2026.
No se han detallado aún el cronograma por zonas o la estructura de costos para los usuarios. Se estima que estos aspectos se comunicarán durante los primeros meses del próximo año, una vez que esté listo el decreto oficial .
Contexto de reemplacamientos previos
El último proceso masivo de canje de placas ocurrió en 2022, durante la administración del anterior gobernador Cuitláhuac García Jiménez, el cual generó ingresos por más de mil millones de pesos. En esta ocasión, se enfatiza que la prioridad no es recaudar, sino contar con una red vehicular más segura y regulada.
Beneficios esperados y desafíos
Beneficios clave:
Seguridad y trazabilidad: el chip permitirá una identificación más segura y veloz ante la autoridad.
Actualización del padrón: mejor identificación de unidades irregulares o con antecedentes.
Simplificación documental: facilita cruces con sistemas como el REPUVE y exámenes de verificación vehicular.
Retos anticipados:
Costo y logística: hay expectativa en conocer el precio del trámite y cómo se administrará el proceso.
Adaptación ciudadana: los propietarios deberán estar informados y preparados para evitar retrasos o multas.
Infraestructura estatal: será necesario fortalecer los sistemas informáticos y de impresión de placas para atender la demanda.
Próximos pasos y vigilancia social
Se espera que a principios de 2026 se publique la convocatoria oficial en la Gaceta del Estado, incluyendo detalles de fechas, costos, puntos de atención y una campaña informativa. A su lanzamiento, corresponderá a los ciudadanos realizar el trámite conforme a las fechas asignadas.
Autoridades estatales han invitado a estar atentos a las publicaciones oficiales y canales gubernamentales. Por su parte, colectivos sociales y cámaras del sector automotriz anunciaron la supervisión del proceso para asegurar que no derive en costos excesivos o inequidades territoriales.